Colegio Áleph - Blog

Fomentando el pensamiento crítico en los estudiantes: estrategias globales

Escrito por Áleph | Sep 29, 2023 8:24:00 PM

Según el filósofo británico Francis Bacon: “El pensamiento crítico es tener el deseo de buscar, la paciencia para dudar, la afición de meditar, la lentitud para afirmar, la disposición para considerar, el cuidado para poner en orden y el odio por todo tipo de impostura”. Esta definición, hecha por Bacon en el siglo XVI, constituye una habilidad crucial en el mundo actual. 

El pensamiento crítico permite a los estudiantes analizar y evaluar la información de manera objetiva para formar un juicio. Los pensadores críticos no aceptan información a ciegas; de hecho, la cuestionan, examinan y sopesan desde diferentes perspectivas.  

Si nos ponemos a pensar con detenimiento en la forma en que se desenvuelve hoy en día la sociedad, constataremos que se trata de una capacidad fundamental para una participación cívica y democrática efectiva. De hecho, en el mundo digital de hoy, es esencial para discernir la información veraz de las “fake news”. 

Sistemas educativos de países con excelentes resultados en educación, como Finlandia, Singapur y Canadá, desarrollan algunas estrategias que permiten generar pensamiento crítico. Conozcámoslas a continuación.

  1. Enseñanza basada en la indagación (Finlandia)
    La enseñanza basada en la indagación es una de las piedras angulares del sistema educativo finlandés. En lugar de limitarse a transmitir información, los profesores plantean preguntas o problemas y guían a los estudiantes a través del proceso de búsqueda de soluciones. Esta estrategia promueve el pensamiento independiente y permite a los estudiantes hacer conexiones y tomar decisiones informadas.
  2. Desarrollo de habilidades de pensamiento (Singapur)
    Singapur ha desarrollado un modelo denominado "Habilidades de pensamiento del siglo XXI", que se centra en el pensamiento crítico y creativo. Los estudiantes participan en debates, resolución de problemas y toma de decisiones. A través de este método, los estudiantes aprenden a cuestionar, reflexionar y resolver problemas de manera efectiva.
  3. Aprendizaje colaborativo (Canadá)
    Canadá fomenta el pensamiento crítico a través del aprendizaje colaborativo. Los estudiantes trabajan en equipo para resolver problemas o desarrollar proyectos. Este enfoque permite a los estudiantes compartir diferentes perspectivas, evaluar críticamente las ideas de los demás y reflexionar sobre su propio pensamiento.

En Áleph, empleamos estas y otras estrategias aplicadas con éxito en modelos educativos del mundo. A ello, sumamos el aprendizaje bilingüe, así como nuestra metodología de Project Based Learning y estrategias de Design Thinking, para formar pensadores críticos y ciudadanos globales.

¿Cómo aplicar estrategias de pensamiento crítico en casa? 

Aunque estas estrategias se utilizan en las escuelas, también pueden ser implementadas desde el hogar para fortalecer y fijar los aprendizajes. Por ello, presentamos algunas estrategias para reforzar el pensamiento crítico fuera del aula. 

  1. Promueve la curiosidad: fomenta en tu hijo la costumbre de hacer preguntas. Haz preguntas abiertas que requieran más que un simple "sí" o "no" como respuesta.
  2. Fomenta la reflexión: Ayuda a tu hijo a pensar sobre sus propios pensamientos. Puedes hacer esto pidiéndole que explique su proceso de pensamiento al tomar decisiones o resolver problemas.
  3. Incentiva la resolución de problemas: Proporciona oportunidades para que tu hijo resuelva problemas por sí mismo. Pueden ser acertijos o situaciones de la vida cotidiana.
  4. Fomenta la toma de decisiones: Permítele a tu hijo tomar decisiones en casa, como qué ropa usar o qué plato preparar para la cena. Discute con él las posibles consecuencias de cada opción.
  5. Anima el debate: Promueve discusiones en casa sobre temas variados. Anima a tu hijo a expresar su opinión y a escuchar y reflexionar sobre las opiniones de los demás. 

Mantengamos en mente que el pensamiento crítico es fundamental para ayudar a los niños a ser independientes, tomar decisiones informadas y convertirse en ciudadanos responsables. No es una tarea fácil, pero con paciencia, persistencia y las estrategias adecuadas, podemos ayudarlos a desarrollarlo y prepararse mejor para los retos del futuro.